Adiós América

Adiós América enlaza desde el título las dos novelas breves que contiene este libro. Pero la relación no termina allí. Ambas comparten un pathos y una estética. En ambas, las protagonistas son mujeres que se abren paso en ámbitos tradicionalmente masculinos.

La primera, Adiós, 9 maneras de decirlo, cuenta a través de nueve narradores diferentes «como en una versión moderna y globalizada de Rashomon», la historia de una mujer que, abandonada por sus padres, ha sido criada por su abuela. Cuando llega a la mayoría de edad viaja a Europa y entra en el mundo del motocross. Pronto se convierte en una campeona imbatible y gana una fortuna. Pese al dinero, la fama y el asedio de los hombres, ella sigue sintiéndose tan sola como cuando era una niña.

América en fuga, la segunda, transcurre en una Madrid que sugiere el clima almodovariano de los años noventa. América, la protagonista, es otra vez una profesional del deporte, en este caso una torera. Hay una relación conflictiva con su padre y un amor desesperado, así como una huida y una persecución folletinesca por distintas capitales europeas.

Con soltura, Cristina Civale ha urdido dos historias intensas y atrapantes.

Las situaciones se suceden con ritmo vertiginoso, el humor es inesperado y ácido, y los personajes persiguen algo que parece inalcanzable: el amor, los sueños, el sentido de la vida.