el fluido
duro
y
delicioso
de ese
polvo prohibido
el que me ahogó
atragantada
y me postumizó
sorprendida
yo me miro
desde acá
no sé dónde es allí
ni donde es acá
no soy la única yo
y me veo allí
lívida
demacrada
lista
para el último fuego
sin mortaja
ni excitación
un polvo que no acaba
y es
final
este espejo
me refleja rozagante
mirándome allí
donde ya no soy
es el día uno
del día clave
el día después
el primero de muchos que deberían
sucederse
-¿¿cuándo se terminarán los días?
alcancé
luego de un casting
cosmopolita de balcones
New York
Tigre
Mar del Plata
Tokio
Roma
Mentón
una muerte
sin domicilio declarado
ni contacto de emergencia
ahora soy la que se mira
sin ser
a la extranjera que se arrojó
al vacío en este pueblo
sin glamour
de la Costa Azul
donde vivo y ella/yo vino sin consultarme
sin saber para molestar quizá alertarme
vino
«elle est morte», dice ese
ella intoxicada se tiró
repite el traductor que no traduce
pero interpreta
les que miran y revisan el cuerpo mío
que no siento toqueteado
porque tengo otro
(eso creo)
elles
hablan atorades
de miedo
ante el cadáver
no me reconocen
no advierten
nuestra semejanza
idéntica
ciegues por la
la burocracia de la muerte
y el terror victimizado
de un suicidio postergado
preparado
perfectamente
probado
deseado
y ahora
consumado
exitoso
pero no
la veo muerta
me miro pero estoy frente a mí,
viva,
en otro universo
¿qué vida compartimos
sin conocernos?
me pregunto
siendo otra pero no
porque soy ese cadáver
que no termina de morirse
no hay día después
hay más días por vivir
jodete
me digo
mientras sigo siendo
en los días
después
atemorizada no por esta muerta
sino por las otra vivas
que soy yo también
y que no sé
cuándo
son
ni
dónde
cuántos más días
nos quedan
yo como ella
buscamos balcones
ambas
torturadas
por el infinito
que aprieta
como la picana
que quizá conocí
en una vida
donde no estuve pero fui yo
siendo sin memoria
el tiempo
los días
siguen
seguirán
no hay sobredosis
ni balcones altos
ni sogas
ni bolsas de plástico
ni venenos
ni vías de trenes
que aplasten
para siempre
«siempre»
esta palabra
que miente
los días crecen
se reproducen
reverberan
te maltratan
te alargan
te trajinan
te violentan
te cojen
te la sudan
te abusan
te tutean
te penetran
como un castigo
y te gritan
«jodete»
en un eco
que desconoce
todo límite
el tiempo
el tiempo
siempre
el tiemp